Automatizar procesos administrativos no solo mejora la eficiencia, sino que también puede suponer una ventaja competitiva crucial. Sin embargo, para muchas pymes, la digitalización —y más aún, la automatización— no siempre es un camino sencillo.

Las pymes suelen tener estructuras más pequeñas, menos recursos y un volumen de operaciones que no siempre justifica una digitalización total. Además, muchas de sus obligaciones fiscales y contables requieren todavía del acompañamiento experto de un asesor que comprenda la complejidad de su actividad. Por eso, aunque algunas empresas pueden digitalizarlo todo, no todas pueden ni deben hacerlo de forma automática y sin supervisión humana.

Aquí es donde entra Zazú: una solución híbrida que permite avanzar en la automatización sin renunciar al criterio experto. Zeta puede ayudar a resolver dudas rápidas, automatizar tareas repetitivas y mantener actualizada la información fiscal. Pero siempre bajo el paraguas de un equipo de asesores humanos que revisan, acompañan y aportan valor estratégico.

La digitalización no tiene que ser radical ni inmediata. Puede ser progresiva, a medida, y adaptada a cada realidad empresarial. Y ahí es donde Zazú se convierte en una herramienta clave para ayudar a las pymes a dar el salto al futuro sin perder seguridad ni control.